La historia de los sellos postales en España durante el siglo XIX representa una etapa fascinante tanto para la filatelia como para la historia de las comunicaciones. Este siglo marcó el nacimiento del sello postal como medio oficial de franqueo y el inicio de un sistema moderno de correos en el mundo.

En España, el primer sello se emitió el 1 de enero de 1850, durante el reinado de Isabel II, y mostraba su retrato en perfil. Esta emisión inauguró una tradición que evolucionó a lo largo de las décadas, reflejando cambios políticos, tecnológicos y sociales. A lo largo del siglo XIX, España experimentó múltiples emisiones que hoy son altamente valoradas por coleccionistas, con variaciones en diseño, dentado, valor facial y métodos de impresión.

Estos sellos no solo sirvieron para garantizar el pago del servicio postal, sino que también se convirtieron en testimonios visuales de la historia nacional: mostraron monarcas, símbolos estatales y, con el tiempo, innovaciones en seguridad y diseño. Además, su estudio permite comprender la expansión del sistema postal español, su modernización y su integración en redes internacionales.

En resumen, los sellos españoles del siglo XIX no son simples piezas de franqueo, son ventanas a una época de transformación política y social, y constituyen un pilar fundamental para la historia.